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domingo, 3 de noviembre de 2013

María Fernández Rosa, PLATA en el Open Internacional Ciudad de Pontevedra 2013.

Y un año más  María vuelve a subirse al pódium en la competición de la que no se ha bajado del cajón desde su primera participación, como cadete, allá por el 2010.
 Esta vez una segunda plaza y por tanto medalla de PLATA en la categoría Junior Femenino para -46Kg fue el resultado de su trabajo.
Personalmente, esta plata no refleja el resultado real de la competición ya que en esta ocasión la organización del evento, el Club Mace Sport, suponemos que en busca de hacer más ameno el Open, elegía en vez del tradicional pase directo, una pseudoliguilla mezclada con la  eliminación directa que claramente beneficiaba a los “perdedores” de combate dándoles la misma oportunidad que los ganadores del pase a la final.
Claro fue el ejemplo en la categoría de María. Un primer combate que ganaba 7-1 y que no servía para nada solo para el lógico desgaste físico y enfrentarse con la perdedora del otro cruce a la que ganaba 10-1. Esta segunda victoria era la que le servía para el pase a la Final. Digo que no sirvió para nada ganar el primero  porque esa contrincante acabaría siendo su rival en la Final habiendo ganado solo un combate por los dos de María. Lo incongruente está en que  la ganadora del otro cruce se quedaba fuera de la final habiendo ganado también un combate y por lo tanto no sabemos porque se eligió este tipo de eliminatoria tan aleatoria, en la que dos deportistas con un combate ganado nunca se llegaron a enfrentar por el desempate para su acceso a la final.
Suponemos que en esta primera prueba que ha realizado el Club Mace Sport con este tipo de eliminatoria, se hayan tomado las notas necesarias para que en futuras ediciones se corrijan estos errores y se hagan más equitativas las eliminatorias premiando el esfuerzo por ganar.

Volviendo a la competición y ya en la Final un empate a 3 tras el tiempo reglamentario y un arbitraje un tanto casero, hacía que en el Punto de Oro María perdiese y por lo tanto la oportunidad de estar en lo más alto del pódium. Aun así la sensación del trabajo bien hecho y la buena forma física, son el buen sabor de boca que María se trae para tierras benaventanas.

ENHORABUENA...